El cronista
municipal de Hecelchakán, Sergio Hernández Puga, explica que los
apellidos mayas se dividen en dos clases, los correspondientes al mundo
físico y los del mundo espiritual, antiguamente se creía que al combinarlos
ayudaban a mantener la armonía en el hombre.
Entre
la variedad de apellidos destacan dos que designan a la muerte y
dos que hacen referencia a la vida; Puc que significa ‘podrido’ y
Puch ‘aplastado’.
A
continuación algunos apellidos mayas y su significado:
-Moo: significa Guacamaya
El
mundo de los espíritus estaba simbolizado por el quetzal, un ave que
simbolizaba al sol, la máxima expresión de la religión prehispánica.
-Ku: dios en general
Refiere
a que todos los hombres se convertían en dioses al conocer el bien y el mal, la
luz y la oscuridad, la alegría y el dolor
Al
combinar Ku-Puc da como resultado ‘el Dios Podrido’, el cual
debe descender al inframundo para conocer que ahí no está el final y renacer al
mundo sagrado.
-Moo-Puch
Es
la guacamaya aplastada y habla del alma adolorida que no parece terminar, pero
al final pasa, se aleja, se desvanece.
-Ac simboliza la tortuga
Nos
recuerda que como las tortugas necesitamos salir del agua para respirar las
cosas buenas de la vida, como las artes, la buena música y superarnos con la
educación.
-Ceh, el venado
Se
refiere a la persona ágil de mente, sobre todo las mujeres, ágil como el
venado.
-Chuc es el carbón
Un
espíritu carbonizado como la obsidiana, es el que ha sido alumbrado en su
conciencia.
APELLIDOS
MAYAS Y SU ORIGEN
Los apellidos son la herencia ancestral de nuestro
origen que nos dan testimonio de una raza, una región y las raíces de donde
provenimos; manifiestan la riqueza etimológica y el árbol genealógico que nos
dan identidad y orgullo familiar y de pueblo.
Hecelchakán es zona maya y el 80 por ciento de sus habitantes son descendientes
de esta cultura de la serpiente, el jaguar y el lucero de la mañana. Tierra de
cultura animista, en la que cada cosa tiene cualidades humanas que nos
distinguen como pueblo.
El restante 20 por ciento de los apellidos son de procedencia española y
constituyen una minoría, Estos apellidos son en breve número de mestizos
descendientes de españoles que habitaron esta tierra y que por mucho tiempo han
convivido con los pobladores de apellidos nativos.
Todos los demás de este porcentaje se fueron incorporando a Hecelchakán al
provenir de otros municipios o Estados, sea por vía matrimonial, emigración o
por cuestiones de trabajo.
Esto ha dado como resultado un mestizaje que está en proceso de evolución
constante y tiende hacia una indigenización de los apellidos y de las uniones
familiares.
Nuestro municipio es crisol del mestizaje de descendientes indios en su mayoría
y herencia escasa de sangre colonizadora. Tendemos hacia la indigenización de
las familias y de nuestra cultura.
En
Hecelchakán, tenemos el privilegio de pertenecer a una cultura grandiosa que
procede del espíritu.
Los
apellidos mayas están bien definidos, cada uno de ellos tiene una simbología de
la cual trataré más adelante. Estos apellidos constituyen un ciclo y no fueron
creados porque sí, sino con un sentido universal y un orden cósmico que nos
recuerda el movimiento cíclico de los dioses ancestrales.
Enseguida se mencionan los términos genealógicos más usuales en el
Municipio de Hecelchakán. Se trató de hacer la relación más completa posible.
Aunque no es un estudio acucioso, sí es un apunte sociológico confiable.
Ac, Aké, Ayil, Ayuso; Baas, Bacab, Balam, Beh; Caamal, Cab, Cahum, Cauich,
Calán, Can, Canché, Cano, Canul, Catzín, Ceh, Cen, Cetz, (Se pronuncian kej,
ken y ketz, respectivamente) Ciau, Cob Cocom, Cohuó, Collí, Cutz.
También, Chablé, Chac, Chalé, Chan, Chay, Ché, Chi, Chin; Dzib, Dzul; Ek, Euán;
Ic, Itzá; Haas, Homá; Kantún, Keb, Koh, Koyoc, Ku; Maas, May, Miss, Moo, Mukul,
Mut; Nah, Naal, Noh; Pantí, Pat, Pech, Pool, Poot, Puc, Puch.
Además están: Simá, Sulub; Tamay, Tax, Tun, Tut, Tuz, Tzab, Tzec;
Uc, Ucán, Uhu, Uicab, Uitz; Xequeb, Xiu, Xool, Xolón; Yah, Yam, Yeh.
La relación de los apellidos castellanos es numerosa, aunque en cuanto a
población constituyen una minoría. Se transcribe el 95 por ciento de estos
apellidos de nuestro Municipio:
Aguayo, Aguileta, Aguirre, Alcántara, Alcocer, Aldana, Almeida, Angulo,
Arellano, Argáez, Alonzo, Arcos, Argáez, Ávila, Avilés, Ayala, Ayuso; Báez,
Barabato, Barbosa, Balmes, Baños, Barrancos, Barceló, Barrancos, Barrera,
Beltrán, Benítez, Bermon, Berzunza, Briceño, Brito, Bojorquez, Borges, Buenfil;
Cabrera, Cambranis, Calderón, Cáliz, Camacho, Cano, Cardoso, Castillo,
Carrillo, Castro, Centurión, Cervera, Cizaña, Cobos, Contreras, Córdova,
Corona, Cortez, Cruz, Cuevas;
Otros son: Chaidez; Damián, Del Río, Del Rivero, Díaz, Domínguez; Escalante,
Escamilla, Espadas, España, Estrella; Fraz, Fernández, Ferrer, Flores, Franco,
Gallegos, García, Garrido, Gijón, Gómez, Góngora, González, Guardia, Guillermo,
Gutiérrez, Guzmán, Hau, Heredia, Hernández, Herrera; Jiménez Juárez, Jurado;
Lara, Lavadores, Lechuga, Lemus, Lira, Lizarraga, Lorenzo, López, Lugo, Luna;
Continúan, Madariaga, Marroquín, Martín, Martínez, Mauro, Medina, Mejía,
Melken, Melquíades, Mena, Méndez, Mendoza, Mezeta, Mijangos, Milán Millán,
Moguer, Molina, Montero, Montiel, Montuy, Morales, Moreno; Navarrete, Novelo;
Núñez; Ojeda, Ordóñez, Orozco, Ortega, Ortegón, Ortiz; Pacheco, Palma, Pavón
Pereira, Pérez, Pinzón, Polanco, Pool, Puga;
Concluyo con los siguientes: Quijano; Ramírez, Rea, Reyes, Rico, Ríos, Rivera,
Rivero, Robaldino, Rodríguez, Rojas, Rosado, Rufino, Ruiz, Ruvalcaba; Salazar,
Salvador, Sánchez, Sandoval, Sansores, Santamaría, Segovia, Sleme, Solís,
Sonda; Sutten, Tafoya, Tinajero, Tejeda, Torres, Trejo, Trinidad, Turriza,
Ulloa; Uribe; Valera, Valle, Vargas, Vázquez, Vela, Velásquez, Vera, Vidal
Villalobos, Villanueva; Yabur; Zacarías, Zetina, Zozaya, Zunza.
Los apellidos distinguen y nos otorgan la verdad de nuestro origen; ricos y
pobres tenemos una herencia cultural que se eslabona a nuestras raíces,
de las cuales debemos sentir orgullo. Hecelchakán se apellida Hunab Ku (un solo
dios), porque procede de un origen indio con destino a la reivindicación de su
cultura maya.